domingo, 14 de julio de 2013

Tipo de Personalidad Cuatro

Tipo de Personalidad Cuatro


Personas que viven principalmente en su imaginación y sentimientos. Pueden ser artísticos, vinculados e inspiradores o quejumbrosos, elitistas y negativos.
Al igual que los Unos, los Cuatros comparan la realidad con aquello que podría ser. Pero, mientras los Unos tienden a buscar su imperfección e intentan corregir lo que está equivocado, los Cuatros a menudo se tuercen fuera de la realidad y viven en sus imaginaciones, sentimientos y humores.
Junto a los Dos y los Tres, los Cuatros gravitan entre la vanidad y la confusión de imagen pero paradójicamente pueden expresarlo. Los Cuatros en mayor medida se identifican con una imagen de ser defectuosos, sobre todo si esto les confiere una calidad de originalidad o especial singularidad. Un Cuatro fuerza, por ejemplo, lamenta su incapacidad para tener éxito en el mundo cotidiano, pero esta queja podría llevar una calidad sutil de presunción. Los Cuatro podrían tener una auto-imagen que es románticamente trágica pero al mismo tiempo elitista.
Los Cuatros sanos tienden a ser idealistas, tener buen gusto y son grandes apreciadores de la belleza. Filtran la realidad a través de una subjetividad rica, sutil y son muy buenos con el pensamiento metafórico, la capacidad de generar conexiones entre hechos y acontecimientos no relacionados. La tendencia Cuatro de ver las cosas simbólicamente se refuerza por su intensidad emocional. Esto crea materia prima artística que pugna por tomar forma. La auto-expresión y la búsqueda del conocimiento de sí mismo son las prioridades más elevadas para las personas con este estilo.
Los Cuatros practican naturalmente la sinestesia, una mezcla crónica de sensaciones que los conducen a intensas reacciones multiniveles. Un Cuatro ingresando a una nueva situación podría ver algo que dispara una imagen mental que, a su vez, evoca un sentimiento que le recuerda entonces una canción; que activa más imágenes que despiertan más olores, sabores, sentimientos y así sucesivamente. Los humores y sentimientos del Cuatro pueden correr juntos como una acuarela bajo la lluvia, produciendo una calidoscópica mezcla de impresiones en reacción a los eventos inclusive más insignificantes.
Los Cuatros valoran la estética de la belleza lo mismo que se armonizan con la naturaleza trágica de la existencia. Cuando sanos, las personas con este estilo trabajan para transmutar el dolor de la vida en algo significativo, a través del trabajo creativo en todas sus expresiones. Los Cuatros son diestros en articular la experiencia subjetiva y pueden ser finos maestros o psicoterapeutas. También pueden ser amigos empáticos de los malos tiempos, capaces de entender los dilemas de otros y sobre todo dispuestos a escuchar al dolor de un amigo.
Debido a la fuerza de sus imaginaciones emocionales, las personas con este estilo a menudo son descritas como artísticas. Muchos de los más grandes artistas del mundo han sido Cuatros y, casi todas las personas con este estilo necesitan encontrar salidas creativas. Los Cuatros trabajan en todo tipo de actividades, pero, siempre que pueden, intentan hacer su trabajo creativamente interesante. La riqueza sensitiva del Cuatro es como la materia prima de la creatividad. Los Cuatros sanos encuentran salidas creativas que les permiten expresar su intensa vida interna.
Cuando los Cuatros son menos sanos, comienzan a enfocarse en lo que no está disponible o que falta en sus vidas. Pueden volverse negativos y críticos, encontrándose incompletos con lo que tienen, viendo en lo presente principalmente la miseria. Se vuelven introvertidos y usan su imaginación para idealizar otros tiempos y lugares. Puede vivir en el pasado, el futuro —o cualquier lugar que parezca más atractivo que aquí y ahora. Los Cuatros tienden a envidiar cualquier cosa que no tienen, encarnando el dicho "el pasto siempre es más verde del otro lado."
La necesidad por ser vistos como alguien especial y único puede también volverse más neuróticamente pronunciada. Los Cuatros pueden parecer muy en contacto con sus sentimientos, pero, cuando enfermos, traducen su sentir auténtico en el melodrama. Pueden estar llenos de lamento y nostalgia, exigiendo reconocimiento a la vez que rechazan todo lo bueno que reciben de sus amistades. Podrían también crecer competitivos y rencorosos, incapaces para disfrutar sus propios éxitos sin desligarse de los logros ajenos.
Envidia
Adversus
Los Cuatros enfermos pueden estar malhumorados o extremadamente sensibles actuando al margen de las reglas cotidianas. Sostenidos por su sentido de originalidad defectuosa, podrían permitirse actuar incorrectamente, ser egoístas o irresponsables. Pueden negarse a tratar con lo mundano y lo ordinario, inconscientemente razonando que de cualquier forma no son de este mundo. Los Cuatros en esta fase se inclinan a sentirse culpables, avergonzados, melancólicos, celosos e indignos.

Los Cuatros profundamente enfermos pueden habitar un penetrante mundo de tormento. Pueden ser abiertamente masoquistas y extravagantes en su auto-desvaloración.
Las vidas de artistas espectacularmente autodestructivos a menudo reflejan este tipo de guión. En esta fase un Cuatro podría alienarse inalcanzablemente. Heridos por un sentido profundo de desesperación, pueden hundirse en su auto-aborrecimiento mórbido o deprimirse suicidamente. Ven su singularidad en condiciones completamente negativas y se destierran en un tipo de exilio.
El deseo de castigarse a sí mismos y a los demás es fuerte y decidido.
Centro:
Sentimiento
Pasión:
Envidia
Fijación:
Melancolía
Visión de sí mismo:
"Yo diferente"
Estructura de temor (lo que evita):
Ordinariez
Estructura de deseo:
Sentirse especial
Trampa o justificación:
Autenticidad
Otros descriptores:
Autoimagen pobre, concentración en el sufrimiento, necesidad de conmover, prodigalidad, emocionalidad, masoquismo, dependencia, arrogancia competitiva, refinamiento, intereses artísticos, fuerte superego.



¿PERO, QUÉ ES EL ENEAGRAMA?



¿PERO, QUÉ ES EL ENEAGRAMA?

Es un poderoso sistema psicológico y espiritual que describe nueve tipos básicos de personalidad. El término "eneagrama" se deriva del griego "enneas", que significa nueve. Estos nueve tipos de personalidad constituyen grupos de personas que se asemejan entre sí por características comunes, por una forma particular que los diferencia de los otros ocho tipos, y que se basa en la percepción misma que las personas del tipo tienden a tener respecto del mundo, de sí mismos y en cómo las personas de ese tipo enfrentan el día a día.
El eneagrama está representado por un círculo, dentro del cual hay un hexágono y un triángulo equilátero. El diagrama mismo tiene todo el significado del eneagrama, siendo el círculo la representación del todo, la unidad lograda; el triángulo equilátero, así como el hexágono, la representación de los nueve puntos básicos que proyectan la manera dominante de cada uno de los tipos de personalidad así como las fuerzas contradictorias que llevamos en nosotros.



¿PARA QUÉ SIRVE EL ENEAGRAMA?

El propósito del eneagrama no es sólo ayudarnos a identificarnos con el grupo al cual pertenecemos, si no que a través de ello, aprender a trabajar con nuestras debilidades y limitaciones en búsqueda de una real superación personal en todos los campos.
Es un camino de autoconocimiento, de revisión de nuestra historia personal y de cómo en nuestras experiencias previas hemos ido moldeando una forma de ser, sentir, y percibir el mundo.
Iniciar el proceso del eneagrama es más que conocer una teoría de personalidad. Iniciar este caminar es lanzarse a la conversión personal, es realmente iniciar el proceso de superación personal.
El proceso implica primero descubrirse, identificarse con un tipo de personalidad. Inmediatamente surge una fase de aceptarse. Esta segunda etapa suele ser dolorosa, sobre todo si nos cuesta aceptar nuestras debilidades. Al lograr, finalmente, la aceptación de lo que somos, iniciamos la búsqueda de la superación personal. El eneagrama mismo nos da luces para este nuevo caminar, nos ayuda a orientarnos respecto a lo que debemos buscar, lo que debemos evitar, la forma en que podemos ahondar en nuestros dones y virtudes, la forma en la que podemos superarnos.

Es importante anotar aquí, que ningún tipo de personalidad es mejor o peor que otro, simplemente son diferentes. Es importante, también, señalar que dentro de nuestro pertenecer a un grupo determinado de personas, seguimos siendo únicos e irrepetibles. Nuestra personalidad puede asemejarse a otras personalidades y por ello nos incluimos en un tipo de personalidad, pero seguimos teniendo una identidad propia.
El eneagrama nos va a ayudar a comprendernos no sólo como estos seres únicos que somos, a entender nuestra particular forma de ser, si no que como seres sociales que somos, el eneagrama nos va a ayudar a entender las relaciones que llevamos con otras personas; y, si llevamos el proceso adecuado, nos va a ayudar a mejorar la comunicación con las personas. Conociendo el sistema de esta teoría, fácilmente comprenderemos mejor a las personas con las que nos relacionamos.

ALGUNOS CONCEPTOS BÁSICOS PARA COMPRENDER EL ENEAGRAMA:

El eneagrama parte del principio de que todos somos débiles, imperfectos y con limitaciones, y, desde ese nuestro ser negativo, nos iniciamos en la búsqueda de la superación personal, superación que es constante e infinita. En ese sentido, la fuerza básica que determina cada tipo de personalidad es esencialmente negativa. Se trata de la "Compulsión".
Ante esta fuerza básica que nos hace ser lo que somos, cada uno empezamos a manejarnos tratando de "controlar" nuestra compulsión. Este control parte de la forma social en que hemos aprendido a desenvolvernos y a ocultar nuestros aspectos negativos. A esta forma de ser ante los demás, se le llama "estrategia defensiva", que será como la máscara que hemos aprendido a utilizar como normal y que hemos desarrollado para sobrevivir o subsistir. Es una estrategia para defender y proteger al yo, una forma de ocultar nuestro verdadero ser, nuestra compulsión.


Para descubrir la compulsión que nos domina, es fundamental "desenmascarar" la estrategia defensiva. Tomando conciencia tanto de nuestra compulsión como de nuestra estrategia defensiva, tenemos mayor libertad personal para salir adelante y superarnos.
Los nueve tipos de personalidad del eneagrama se agrupan en tres centros básicos que van a indicar de dónde nace la fuerza de la compulsión en cada tipo.

Los centros básicos son:

a. Entrañas (tipos de personalidades 8,9 y1): Es el centro basado en "lo corporal". Se basan en la intuición, la intuición basada en el cuerpo y en los instintos. Tienden a ser impulsivos.

b. Corazón (tipos de personalidades 2,3 y 4): Es el centro basado en "lo emocional". Se basan en los sentimientos y en las relaciones interpersonales. Por lo mismo, son muy sensibles y tienden a ser amables, afectuosos, aunque a la vez manipuladores y con muchos sentimientos de culpa.

c. Cabeza (tipos de personalidades 5,6 y7): Es el centro basado en "lo intelectual". Se basan en las ideas y las razones. Tienden a ser muy ansiosos, a veces temerosos, pues para ellos, todo debe tener lógica y raciocinio. Son grandes idealistas.

La integración de los tres centros en la persona, es base para la superación personal, y quizás una de las metas principales en el trabajar con el eneagrama. Encontrar un equilibrio entre las cosas que sentimos, pensamos y hacemos físicamente, es el inicio de la búsqueda de una madurez personal.